Amoavé es que hace musha
caló, es que estoy muy cansada y es que me pongo a plantear una idea y
ahora, mirusté por donde me tengo que poner
explicar quién ha dicho qué.
Porque a estas alturas del partido, ponte a buscar y a citar
porque sabes quién coño era el padre de Ramsés II. ¡Coño! Lo sé porque sí,
porque lo llevo sabiendo toda la vida.
Porque oiga, me puedo liar lo mío con las tildes, y con las comas, o no, de hecho lo hago, pero soy de
la generación de los de leer y
preguntar, de los de admitir ignorancia y beber de quien sabe más, o sea, de
quien sabe, porqué tienes bastante bagaje para destronar fantasmas. Que haberlos, haylos, a chorreones, y muchos con cosas publicadas, talmente como si fueran serias.
Y tienes un planteamiento, un concepto, y (menos mal)
alguien te obliga, las putas formas, a darle forma, valga la redundancia, y si
no vale, pos a la mierda. Pero oye, que las formas pueden ser impecables, y la
idea ser una apología al sepuku de las ostras.
A mi personalmente, que soy dispersa por naturaleza y las
ideas me saltan como piojillos por la cabeza, pos oye que me viene bien una guía.
Peeeeeero ¡Artoquietoparao!. Que lo del orden. Bien. Necesario e imprescindible si
me aprietas un poco. Hasta que asfixias a la gente. Hasta ahí. Y ni un milímetro
más.
¿Qué mierda es lo del énfasis en el autor? ¿O en el texto? O
si son más de tres o menos de cinco? ¿Si la cita es de más de cuarenta palabras
o de menos?
¿Pero en qué cabeza cabe, si yo estoy toita toa enfrasca con
el Hobbes o con mi Bobby Merton me ponga a contar palabras como si me fuera la
vida en ello?
Aclarando que es gerundio. Estoy haciendo esto porque me
apasiona, me divierte, y si deja de divertirme o de apasionarme, lo puedo
mandar a la mierda sin pena y sin remordimientos.
No me va a poner ni a quitar nada en mi trayectoria personal. Mi ÚNICA pretensión es decir como se ve
desde aquí, y si le sirve a alguien, pos oye, pos mola. Y si no, pos nada.Sin amontonarnos,
Soy, una de esas, que se ha leído todo lo que la vida le ha
puesto en las manos, y me ha puesto mucho y muy bueno, malo también, y también me
lo he leído sin empachos y sin dramas. Y quien no sepa aprender de lo malo, que se ponga unas cataplasmas.
Lo que a mí me toca es
que la gente pueda ir a las fuentes, yo, que soy una devota de las bibliografías,
de los buenos libreros, esos, los libreros, con los que te puedes pasar horas y
horas y horas, hablando de libros, esos que tienen joyas que difícilmente se
puedan catalogar de best sellers o de top tens de nada.
Pos que como que no, que yastá, que voy a terminar el TFG
sin las pollas de la APA, pero lo bastante clarito para que todos encuentren lo
que cito.
Que no son bibliografías, son
viejos amigos, leídos, releídos, compañeros y consuelos, y si no es académicamente correcto.
Pos vale, tomaros algo, yo
invito.